La industria automotriz está presenciando una transformación significativa con el reciente lanzamiento del sistema de asistencia avanzada al conductor (ADAS) «God’s Eye» por parte de BYD. Esta innovación marca un importante avance en la evolución de la conducción inteligente, ofreciendo tecnología de vanguardia a precios accesibles.

El sistema «God’s Eye» se presenta en tres variantes, lo que permite a BYD integrar esta tecnología avanzada en todos sus modelos. Entre ellos se encuentra el hatchback BYD Seagull, que, con un precio de 69,800 yuanes (aproximadamente 9,550 USD), destaca por su accesibilidad económica.

La variante más avanzada, conocida como «God’s Eye A», incluye tres sensores LiDAR y un sistema DiPilot 600 con una potencia de cálculo de 600 TOPS. Esta configuración proporciona capacidades de percepción y toma de decisiones excepcionales, elevando el estándar de seguridad y comodidad en la conducción autónoma.

Por otro lado, el modelo de entrada, «God’s Eye C», está equipado con una configuración innovadora de 12 cámaras, radares de onda milimétrica y sensores ultrasónicos. Esta combinación de tecnologías ofrece una percepción precisa y completa de 360 grados del entorno, lo que contribuye a una experiencia de conducción más segura y confiable.

Wang Chuanfu, presidente de BYD, ha destacado que la compañía cuenta con la mayor base de datos en la nube de vehículos en China. Este recurso, junto con un equipo de 110,000 ingenieros (de los cuales 5,000 están dedicados al desarrollo de tecnologías de conducción inteligente), respalda el avance continuo de BYD en el campo de la conducción autónoma.

El sistema integra inteligencia artificial en la nube, conectividad avanzada mediante redes 5G y satelitales, y actualizaciones OTA. Estas características aseguran que las capacidades del sistema evolucionen constantemente, manteniendo a los vehículos de BYD en la vanguardia tecnológica.

Además de mejorar la seguridad y la comodidad al conducir, «God’s Eye» posiciona a BYD como un líder en el mercado global de vehículos eléctricos. Según Wang Chuanfu, la conducción inteligente será un factor clave en las decisiones de compra de vehículos en los próximos 2 o 3 años, lo que resalta la relevancia de estas innovaciones.

La capacidad para ofrecer un sistema de conducción autónoma avanzado a un precio tan competitivo es impresionante. En occidente, quizás sea el momento de reflexionar sobre cómo competir con estos avances tecnológicos o enfocarse en otras áreas donde puedan sobresalir.

Las innovaciones de BYD no solo responden a las críticas previas sobre sus sistemas de conducción, sino que también redefinen los estándares en la industria automotriz. Con «God’s Eye», BYD no solo mejora la experiencia de conducción, sino que también establece un nuevo referente para la tecnología de vehículos autónomos.

Fuente: america-retail.com